Hay muchas formas de ver una ciudad, pero una de las más valoradas en los últimos tiempos es el turismo gastronómico, por ello una buena opción para visitar Valencia es recorriendo las bonitas calles del barrio más antiguo de la ciudad: El Carmen. Es, sin duda, el barrio con más historia de la ciudad, y presenta un gran número de lugares en los que poder salir a tomar pinchos a cualquier hora del día.
Salir a tomar pinchos, una costumbre también en Valencia
Gracias a su inigualable clima, Valencia es el lugar perfecto para poder disfrutar del buen ambiente de sus calles en cualquier momento del año, de modo que no resulta costoso trasladarse de un lugar a otro. Pasear por el Carmen nos permitirá gozar de sus gentes, del bonito centro histórico de la ciudad y de sus platos. Existen bares típicos en los que se pueden tomar los pinchos más característicos que hallaríamos también en el País Vasco, pero no dejemos de lado los que son más clásicos de la ciudad de Valencia (como sus famosas clóchinas o incluso una tapa de paella), aquellos que se caracterizan por ir acompañados de prestigiosos vinos o para probar una deliciosa tapa de tortilla de patata (algo que nunca falla).
Visitar Valencia conlleva muchas cosas buenas, pero visitar El Carmen es la forma de adentrarse en el barrio más peculiar de la ciudad, es hacer turismo mientras tomamos unas cervezas, realizamos una cata de vinos pasando de un local a otro o probamos unos cuantos pinchos típicos de la región o de los diferentes puntos del país. Cualquier tipo de turismo es bien recibido, pero si lo que estáis buscando es un lugar en el que poder disfrutar de todas estas variantes del mismo, sin duda este es el destino idóneo.